Mantenimiento de calderas en Granada

El mantenimiento de una caldera es un procedimiento determinante para garantizar tanto un funcionamiento eficiente y seguro del corazón de tu sistema de calefacción como la máxima vida útil posible para este tipo de dispositivo. En MasAgua somos especialistas en realizar un mantenimiento de calderas efectivo y barato en Granada, ¡déjanos contarte por qué necesitas este servicio y qué puedes esperar por nuestra parte!

Ventajas de realizar el mantenimiento de caldera

El cuidado de la caldera de tu sistema de calefacción es primordial, ya que cualquier problema con ella se traducirá en tener que hacer un gran gasto para volver a ponerla en marcha o tener que dejarla fuera de funcionamiento, lo que implicará pasar frío en invierno.

Estos son los principales beneficios de hacer un mantenimiento de calderas periódico

Una caldera con un buen mantenimiento puede ofrecer entre 15 y 20 años de funcionamiento al más alto rendimiento.

Además del alargamiento de su vida, el mantenimiento de una caldera también asegura mayor eficiencia en su funcionamiento, lo que se traduce en que necesita menos combustible para ofrecer las temperaturas deseadas.

Más eficiencia es igual a ahorro económico, pero el mantenimiento también garantiza que se producirán muchas menos averías y que, de ocurrir, estas serán de menor gravedad. Es decir, a medio-largo plazo sale mucho más rentable realizar un mantenimiento de calderas que andar reparándolas.

Una caldera en mal estado puede suponer un riesgo para la vida de las personas que desarrollan su vida cerca de ella. Por eso es vital detectar posibles fugas de gas, fallos eléctricos o cualquier otro posible problema de forma precoz.

Debido a lo peligroso que resulta, usar una caldera en mal estado y ser detectado puede traducirse en fuertes sanciones económicas por incumplimiento de las normativas. Así pues, un mantenimiento adecuado también supone un ahorro en este sentido.

Preguntas frecuentes

Existen distintos parámetros a tener en cuenta a la hora de revisar una caldera para asegurar que su funcionamiento está fuera de todo peligro:

  • Proceso de combustión (quema) del combustible.
  • Presión del agua en el interior, así como su nivel.
  • Estado de las válvulas de seguridad.
  • Nivel de acumulación de sedimentos y suciedad en general.
  • Buen estado de los sistemas de control, encargados de apagar la caldera en caso de presentar esta algún tipo de defecto.

No realizar un mantenimiento periódico de la caldera puede derivar en la aparición de diversos contratiempos que pueden poner en riesgo tanto al dispositivo como la vida de las personas que la utilizan:

  • Acortamiento de la vida útil de este elemento.
  • Riesgo de intoxicación a causa de escapes de gas, así como riesgo de explosión a causa de la presión interior de la caldera o defectos en la combustión.
  • Descenso en la eficiencia de la caldera, lo que se traduce en mayores costes para llegar a alcanzar las temperaturas deseadas.
  • Sufrimiento de averías, que a la larga salen más caras que el propio mantenimiento de la caldera.